Sábado diario

Los cristales rotos en la mollera de los que habló versificando Carlos Barral. De amanecida palpo nervioso y urgente el otro lado de la cama, y me alivia el vacío de sábanas sin fémina anónima. Antes de que suene el despertador he preparado café concentrado y contundente. Cigarrillo. Ducha demorada y templada. Diríamos de vacaciones pero tengo trabajo. La grabadora, sí, sí, uno, dos, uno, dos. El periodismo, para los que carecemos de imaginación, tiene la ventaja de ofrecer una historia sin miedo a la pantalla en blanco, pero condena asimismo a la fatalidad desconocedora de libre albedrío. Así un hipocondríaco cumple el encargo taciturno de entrevistar a una mujer enferma. Como siempre, cuando llega el fotógrafo empieza la fiesta. Me retiro con los apuntes, la grabación y el titular sonsacado. Llamo a mon pare y le pregunto qué tal la paella abigarrada que no cataré. Hablo con ma mare, que me recuerda lo guapa que es y está, y no puedo menos que pedirle cita para mañana domingo. “Em convides, fill?” ¡Mujeres! Llego a casa y me tomo una ración doble de aspirinas con un rápido de Macallan. Salgo a la calle y recalo en una pizzería para el aperitivo. Aparece Daniel Tercero y descubre que somos vecinos. Pues ha valido la pena el traslado, la verdad. Como unas tapas (ensaladilla y un par de albóndigas) en una terraza donde me pegan el sablazo. Aburro el cielo metálico y la (meta)física ligera de ropa con un café con hielo. Vuelvo a casa. Llama M. Quedamos para mañana. Leo un rato a La Bruyére ("La honradez, la deferencia y la cortesía de las personas de edad avanzada de uno y otro sexo me inspiran una gran opinión sobre eso que llaman los viejos tiempos". "El que habla poco sólo encuentra ventajas; de él se presupone que tiene talento, y si es cierto que lo tiene, entonces se piensa que es excelente"). Manipulo perezoso la grabadora.
Domingo toca madrugar y picar piedra.

***
¿A quién si no a ti?

A TI QUE TE LO HACES
(Joaquín Sabina)

A ti que te lo haces
de baile de disfraces cada día,
a ti que te lo montas
de niña tonta en medio de una orgía,
a ti que me has ganado
con un naipe marcado la partida,
a ti que te has colado
en el coto privado de mi vida,
a ti que aún no sabes
los besos que te caben en la boca,
a ti que has comprendido
que a veces el olvido se equivoca,
a ti que has preferido
vivir como si nada fuera eterno,
a ti que has compartido
conmigo una almohada en el infierno,
a ti que has decidido no prestar atención
a frases del tipo "ese menda va a ser tu ruina",
a ti que has detenido con un beso el reloj,
a ti que me enfermas,
a ti que eres mi envenenada medicina...,

a ti que vas deprisa
por miedo a que la risa se marchite,
a ti que te diviertes
jugando con la muerte al escondite,
a ti que has levantado
el árbol de tu nido en mi tejado,
a ti que has dirigido
la flecha de cupido a mi costado,
a ti que has decidido no prestar atención
a frases del tipo "ese menda va a ser tu ruina",
a ti que has detenido con un beso el reloj,
a ti que me enfermas,
a ti que eres mi envenenada medicina...