Tierralibertad impone el año nuevo. Aguantaremos a los mismos gilipollas, a los modernikis, a los (im)pagados de sí mismos y manierismo sin encontrarse, a los iluminados (¡qué coñazo!), a la derecha reciclada y demócrata, a la izquierda mohosa, al centrismo aburridísimo, a la madre que nos parió-y-ella-tiene-poder.
Entre las ausencias, Monicelli: Reírse de la tragedia peor. Y aún los tontos de media España repiten loritos que "La Vaquilla" de Berlanga fue una frivolidad imperdonable. Pobrets.
Vendrán años hórridos y nos harán más aprendices al sol.
Que la humildad no te birle la soberbia. Rondo y cinco.
Salud en 2011.